MANUEL SEIJAS INFANTE.
Un gallego afincado en León, donde ejerció una amplia y densa carrera musical.
Nacido en Coruxo (La Coruña), fue el menor de nueve hermanos. Con solo 8 meses de edad, quedó huérfano de padre.
Su familia advierte en él, un don especial para la música. Con nueve años comienza a recibir clases de percusión impartidas por un vecino. A los 11 años, ya está integrado en orquestas de once a catorce componentes. Su primera orquesta y la que mas le marcó fue la de ‘Los Patolos’, de Puentedeume.
Por su corta edad, los miembros de la orquesta tenían que ir a buscarle a casa y devolverle tras las actuaciones. Manuel Seijas, tan pequeño, pero siempre responsable, precisaba de la ayuda de sus compañeros, ya que no podía con la batería. Era la atracción principal de la orquesta. Tocaba en pantalón corto y apenas se le veía tras la batería.
Todo su afán era ganar dinero para entregárselo a su madre y ayudarle en la economía familiar. Tocó también con sus hermanos mayores en sus ratos libres. Uno de ellos, muy buen gaitero, llegó a ser el Gaitero Mayor del Ballet Príncipe de Viana, de la Diputación Provincial de La Coruña.ç
Entre orquestas y bandas de gaitas, el niño fue fue creciendo hasta que llegó el tiempo de incorporarse al servicio militar. Días antes de su incorporación a filas, fallece su madre.
En 1942 ingresará en aviación, en la base del Pinar de Antequera (Valladolid) y posteriormente es destinado a la Base de Aviación de La Virgen del Camino en León.
Manuel Seijas, metódico, cumplidor, responsable y ordenado, es valorado por sus superiores, que le proponen permanecer en la base como personal civil, tras su licenciatura. Es en este preciso momento, cuando se integra definitivamente en esta tierra y como tal, es considerado por la persona que esto escribe y por los músicos que le conocimos, como un músico leonés mas.
Comienza a tocar como batería eventual en diferentes salas con otros músicos militares, sobre todo en el antiguo salón de baile de La Virgen del Camino, así como en otras salas de la capital. Mas tarde lo hará, ya con formaciones mas o menos estables.
En 1948 se casa con Cilinia Lois y tienen dos hijos.
Al trasladar la Academia General de Aire de La Virgen del Camino a San Javier (Murcia), Manuel Seijas decide quedarse en León. En 1951 oposita con éxito e ingresa como Policía Local en el Ayuntamiento de León. Por su condición de policía local, al estar legalizado en el uso de armas, puede realizar labores de seguridad en sus ratos libres, en la antigua factoría de Elosúa, convirtiéndose en el primer guarda jurado de la capital, en el año 1955. Finalmente, pide la excedencia en el Ayuntamiento de León y se dedicará profesionalmente a la seguridad de la fábrica.
Años antes como policía local, fue el encargado del cobro de recibos en la capital y barrios circundantes.
Siempre vinculado a la música con diferentes combos y agrupaciones, se entregó siempre a todas ellas, con una pasión e ilusión enorme, realizando todas las sesiones con orquestas que su trabajo le permitía. Estuvo con muchas orquestas estables, pero también, con formaciones temporales o esporádicas de músicos, muy de moda en los años 60. Ha tocado con casi un centenar de músicos de diversa formación, edad y estilos.
Su peculiar forma de tocar la batería, era algo sorprendente que llamaba siempre la atención, no solo a otros músicos; también a la audiencia: vigoroso, incansable, detallista, inquieto, perfeccionista, incluso algo nervioso y con mucha velocidad, su arte con la percusión, tenía un toque especial; era, sin lugar a dudas, la atracción, la estrella o el “rey del mambo”, en cada una de sus actuaciones, estuviera con la orquesta que fuera.
Tras tocar durante más de dos décadas con diversas orquestas e infinidad de músicos, funda la charanga “Los Marinos”, algo mas tranquilo y relajado, pero excitante y lúdico, recorriendo toda la provincia de León, otras ciudades de España y alguna del país vecino, Portugal. La charanga Los Marinos, sigue funcionando en la actualidad, con otros componentes, herederos de su legado fundacional.
Tras el éxito de Los Marinos, funda otra nueva, “Los Almirantes” de carácter local y provinciano. Debido a su avanzada edad, no desea largas estancias fuera de su domicilio, dedicando la actividad de esta última, exclusivamente, a las actuaciones en León y provincia.
Hay que reconocer una extraordinaria organización en las agrupaciones-charangas de las cuales siempre ejercía como responsable Manuel Seijas. Todos sus componentes usaban espléndidos uniformes de brillantes colores elegidos por él, con diferentes pantalones, camisas, chaquetas con hombreras y gorras de plato con adornos y cordones dorados. Manuel Seijas equipaba con gran primor todas sus charangas para ir un paso por delante del resto, con unos elegantes y vistosos uniformes que cuidadosamente guardaba en su casa, tras las actuaciones y que adquiría en una tienda especializada de Valencia.
Era tan grande su pasión por la música, que poco antes de su fallecimiento, muy enfermo, pidió a su familia que le acercasen la caja y las baquetas para tocar por última vez, con las pocas fuerzas que le quedaban.
Falleció el 26 de Mayo de 2009 a la edad de 86 años de edad.